¿Romperías la carrocería de tu coche para salvar a un gatito?
Pues es exactamente lo que hizo Erran Frazier, un ciudadano estadounidense, residente en Vero Beach, Florida. Frazier comenzó a escuchar un maullido que provenía de alguna parte del interior de su nueva camioneta. Al principio pensó que eran imaginaciones suyas, pero finalmente optó por tratar de salir de dudas y para ello colocó una apetitosa lata de comida para gatos bajo uno de los neumáticos... junto con un sistema de videovigilancia con la esperanza de captar imágenes del intruso felino que vivía de ocupa en su coche y al que no era capaz de ver, pero al que sí escuchaba.