El elemento de la carrocería que difícilmente volveremos a ver: los adornos del capó, un lujo del pasado
Los adornos en el capó son ya cosa del pasado. Cada vez es menos frecuente ver este tipo de ornamentaciones en la carrocería de los vehículos y que hacían las delicias de los amigos de lo ajeno.
El cromo se utilizaba para destacar el lujo que suponía tener un vehículo, y estaba presente a lo largo de toda la carrocería, desde el marco de los faros a las ventanillas. Sin embargo, la evolución de los diseños ha acabado con ellos.
Este adorno servía para identificar fácilmente la marca del vehículo y fueron muy populares en los años 20, 30, 40 y 50. Algunas marcas, como es el caso de Mercedes-Benz, incluso ponían énfasis en este lujoso ornamento. “Producto de fama mundial de las fábricas de automóviles más antiguas del mundo”, destacaban en sus anuncios.
Desaparecen los adornos fijos del capó
Sin embargo, las regulaciones introducidas en los Estados Unidos para todos los vehículos vendidos como model year 1968 y posteriores significaron la desaparición de estos adornos fijos del capó.
En Europa se demoró la misma decisión hasta 1974, teniendo de adaptarse las distintas compañías a las regulaciones que el Viejo Continente acabaría imponiendo a todos por igual.
Una desaparición que también está ligada a la seguridad vial, ya que estos adornos presentaban un peligro en caso de atropello a peatones.