¿Economía circular? Cómo construir a partir de chatarra un Bugatti Chiron ¡y conseguir que funcione!
Conducir un hiperdeportivo de lujo es un anhelo que la mayoría de personas no pueden permitirse. Solo quienes disponen de una cuenta corriente muy holgada están en disposición de darse el capricho de comprarse todo un Bugatti Chiron como ocurre con el cantante de reguetón Bad Bunny o el futbolista portugués Cristiano Ronaldo. Sin embargo, si tienes 30.000 euros puedes hacerte con una réplica de lo más alucinante...
Y es que presumir de un Chiron se puede hacer ahora por mucho menos de los 2,5 millones de euros que pagó CR7 por el suyo ¿Cómo? Pues muy fácil. Sólo te tienes que poner en contacto con un taller de Tailandia donde han fabricado un par de réplicas de este modelo por un precio mucho más módico: 30.000 € la unidad.
Esta es la cantidad (es decir, aproximadamente un 1% de su valor real) que un cliente sueco ha pagado a los responsables del taller Scrap Metal Art Thailand para hacerse con una copia del coche francés.
Como no podía ser de otra manera, las dos unidades del Bugatti Chiron fabricados en Tailandia tienen truco. Se trata de sendos ejemplares construidos íntegramente a mano a partir de piezas de vehículos desguazados.
Un Bugatti Chiron muy especial
Tuercas y tornillos, así como otras piezas procedentes de la chatarra, forman parte de la estructura de estos singulares Chiron que han sido construidos en un taller situado a dos horas al este de Bangkok. Si bien se les ha colocado un motor para hacerlos mucho más reales, no hace falta decir que es falso.
Desde lejos, el Chiron de color azul eléctrico parece real. Pero a medida que uno se acerca al coche se da cuenta que ha sido fabricado con piezas procedentes de un desguace. El parabrisas y los demás cristales, incluidos los faros, han sido sustituidos por una red metálica. Las puertas de uno de esos dos coches no se abren y en el interior del habitáculo, los acabados de lujo que caracterizan a los Bugatti brillan por su ausencia.
Además de esos dos ejemplares de la marca francesa, en este taller también se han fabricado otros coches de forma artesanal. A través del vídeo publicado por CB Media en su canal de YouTube se puede ver la réplica de un Mercedes-Benz 300 SL Gullwing 'alas de gaviota'.
También podemos ver un Ferrari 250 GTD que todavía está en proceso de construcción. La carrocería del Mercedes está confeccionada con tuercas, tornillos y otras piezas de pequeñas dimensiones soldadas entre sí.
Scrap Metal Art Thailand abrió sus puertas en 2012 y trabaja en la realización de encargos que le llegan de más de 40 países del mundo. Entre sus clientes figuran miembros de las casas reales de los Emiratos Árabes Unidos y de Kuwait.
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Los coches no son las únicas piezas con las que se atreven los artesanos del taller. También trabajan en la construcción de pequeños objetos que se pueden conseguir a partir de 2.500 euros y hasta enormes estructuras metálicas de más de 10 metros de altura.
Entre estas últimas piezas, destacan la construcción de las réplicas de los robots que aparecen en la película Transformers y otros superhéroes del mundo de la ficción como Robocop o Terminator.
Para admirarlas de cerca -miden más de 10 metros de altura- es necesario subirse a la escalerilla de avión que los responsables del taller-museo ponen a disposición de los visitantes. Para acceder al recinto hay que abonar el equivalente a 1,80 euros que es lo que cuesta la entrada.