Los coches autónomos serán realidad en 2023: ¿habrá menos accidentes? ¿dejaremos de conducir?
A partir del 2023 saldrán al mercado varios modelos con tecnología de conducción autónoma de nivel 3. Aunque ya hay algunos modelos a la venta, hasta el próximo año no será de forma más 'masiva'. Además, existe una proyección hacia 2024 cuando se pretende igualar, incluso superar, los niveles de seguridad de un conductor humano.
El estudio “Coches autónomos, robotaxis y sensores 2022-2042” , de la consultora tecnológica IDTechEx, señala que, para ese año, los distintos proyectos de circulación en pruebas pasarán de realizarse en ciudades concretas para extenderse a nivel nacional en cada país y generalizarse.
En este sentido, está previsto que a lo largo de 2022 se pongan en marcha, por ejemplo, las pruebas de la primera flota de taxis autónomos en Munich. Una tecnología con la única intención de que llegue a vehículos particulares.
Qué es la conducción autónoma nivel 3
En este nivel de autonomía, el conductor podrá dejar el control del vehículo al propio coche dependiendo de algunas circunstancias como puede ser en una autopista. Es importante concienciarse de que no se puede dormir.
En el caso de que cuentes con un coche autónomo de nivel 3, llegado el momento, debes estar atento por si acaso tienes que volver a hacerte cargo de la conducción. Y para ello, el coche te avisara con antelación.
Todo esto, supone un cambio gigantesco respecto a ahora cuando, en los coches 'manuales', la responsabilidad es absolutamente del conductor. En cambio, cuando los coches sean autónomos el peso de la responsabilidad recaerá sobre el fabricante del vehículo.
¿Y qué pasa con la legislación?
Uno de los grandes problemas para la introducción de estos vehículos, la falta de legislación específica para este tipo de conducción, poco a poco se va aclarando. De hecho, este estudio señala que la normativa en varios países podría estar lista a finales de este mismo 2022.
En concreto, el informe señala como pioneros a países como Alemania, que marcará la tendencia en Europa; Japón y Reino Unido, que siguen los dictados de la UNECE, la Comisión Económica de las Naciones Unidas para Europa.
Este organismo ha aprobado el uso de la asistencia de mantenimiento de carril automatizado durante la circulación, lo que supone que los conductores podrían desentenderse de conducir bajo ciertas condiciones:
- Que la velocidad sea inferior a 60 km/h.
- En vías donde no haya peatones, es decir, autopistas y autovías.
- El coche mande el aviso al conductor 10 segundos antes de que sea necesario tomar el control.
- Incluya un sistema de reconocimiento de la capacidad del conductor. O sea, un sistema que alerte que tú eres el que conduces o no.
¿Dejaremos de conducir en 2050?
Con el problema de la normativa resuelto, el estudio de IDTechEx pronostica que, para 2046, estos vehículos autónomos podrían satisfacer la demanda total de movilidad. Y que, para 2050, podrían llegar a sufrir menos de un accidente anual.
Debido a esa conclusión, el citado informe se atreve a predecir que, ese mismo año, muchos países llegarían a prohibir la conducción humana en vías públicas… de forma que esta no interfiera con la conducción autónoma y evitar así accidentes y lesiones.