¿Cuáles son las carrocerías más recordadas de los coches de James Bond? Las recopilamos al cumplir los 60
James Bond cumple 60 años el próximo 5 de octubre y para conmemorar este aniversario la marca Land Rover ha lanzado una edición especial. No obstante, la firma británica no ha sido la única elegida por el agente 007, ya que el agente secreto más conocido nos hará recordar muchos modelos más que han pasado por sus manos. Y es que a lo largo de estas seis décadas, los actores que encarnaron a Bond han tenido la oportunidad de conducir gran cantidad (y variedad) de coches, algunos de los cuales marcaron época.
Sunbeam Alpine // '007 contra el Dr. No' (1962)
El Sunbeam Alpine de 1962 fue un cupé descapotable de dos plazas con motor delantero, de cuatro cilindros y cuatro marchas, que contaba con 80 CV. La tracción trasera le proporcionaba una conducción más ágil y dinámica. Fue el primer coche Bond en su primera película de la saga.
Bentley 3½ litre // 'Desde Rusia con amor' (1963)
Modelo de 1935 está basado en un programa experimental de Rolls-Royce, aunque era similar a Bentley, disponía de un carácter más deportivo. Destacaba por tener un motor de 6 cilindros que ofrecía 110 CV de potencia con la capacidad de una velocidad máxima de 145 km/h. Algo poco habitual en aquella época.
Aston Martin DB5 // 'Goldfinger' (1964)
El famoso coche Bond. Fue diseñado por el estudio italiano Carrozzeria Touring Superleggera y su motor destacaba por los 282 CV que le permitían llegar a los 233 km/h de velocidad. Además, el equipamiento de serie incluía asientos reclinables, ventanas eléctricas, ruedas con radios de alambre cromadas e incluso un extintor de incendios.
Lincoln Continental Cabrio // 'Operación Trueno' (1965)
Este automóvil se hizo mundialmente famoso por ser el vehículo donde asesinaron al presidente John F. Kennedy en 1963. A pesar de ello, representa el diseño Flow Line: formas suaves, fluidas y elegantes. Destacan sus puertas traseras que cuentan con apertura invertida.
Toyota 2000GT // 'Solo se vive dos veces' (1967)
El productor de la película, Albert Broccoli, quedó alucinado del prototipo del Toyota 2000GT en el Salón del Automóvil de Tokio de 1965. Por eso, decidió que éste sería el coche de la próxima entrega. Se trataba de un cupé biplaza que se fabricó bajo licencia por Yamaha y con un propulsor de seis cilindros que le permitía desarrollar una velocidad punta de 225 km/h.
Aston Martin DBS // 'Al servicio secreto de su Majestad' (1969)
Pasó a ser el sustituto del DB6 e incorporó un diseño más moderno y acorde a los estándares de la época: una trasera al estilo fastback y una parrilla delantera cuadrada, opuesta a todo lo que se había visto en otros modelos de la marca. Su propulsor V8 de 5.3 litros le permitía una velocidad máxima de 260 km/h.
Ford Mustang Mach I // 'Diamantes para la eternidad' (1971)
Su carrocería se trataba de un cupé tipo fastback, con una caída muy pronunciada en la parte trasera. Se caracterizaba por su motor de siete litros y 375 CV le permitían acelerar de 0 a 100 en 6’30 segundos. Fue el último gran Mustang de Ford debido a la preocupación en las autoridades estadounidenses por las emisiones y la seguridad.
AMC Matador cupé // 'El hombre de la pistola de oro' (1974)
Un AMC Matador se convertía en un aeroplano ligero para huir de James Bond. El modelo montaba un motor V8 de 6 litros que le otorgaba una potencia de 180 CV. En esta película todos los vehículos que aparecen son de la compañía AMC.
Lotus Esprit // 'La espía que me amó' (1977)
Uno de los coches más icónicos de la saga. Hacía falta un impulso de los AMC en la anterior película. Su capacidad para convertirse en un vehículo submarino impresionó a la audiencia. No obstante, todo era debido a la magia del cine, ya que durante el rodaje se tuvieron que usar seis coches para realizar la transformación tierra-agua.
Jeep Wagoneer // 'Moonraker' (1979)
La primera vez que la marca Jeep se colaba en una película de Bond fue con el modelo Wagoneer, que se comercializó en sustitución del Jeep Willys Station Wagon. Se le puede considerar el abuelo de los SUV actuales al unir el concepto de berlina con la tracción 4x4.
Citroën 2CV // 'Solo para sus ojos' (1981)
Probablemente, es el coche que menos encaja con los presentes en la saga. No obstante, la persecución que protagoniza Roger Moore en un 2CV amarillo por tierras griegas es épica. Este Citroën contaba con un motor de 602cc que entregaba 28,5 CV de potencia y una velocidad máxima de 110 km/h. Por lo visto en la película, nadie lo diría...
Alfa GTV 6 // 'Octopussy' (1983)
Diseñado por Giugiaro, este Alfa se convirtió en uno icono de la época por su belleza. Se trataba de un modelo con carrocería cupé para cuatro personas que montaba un propulsor de 6 cilindros en V a 60 grados de 2492cc. Su potencia era de 160 CV y rendía una velocidad máxima de 220 km/h.
Renault 11 TXE // 'Panorama para matar' (1985)
Otra rareza de esta lista que protagonizó otra icónica escena, esta vez por los Campos Elíseos de París. El R-11 que vimos sin techo, cortado por la mitad, fue un modelo muy popular de la marca del rombo en los 80, que sorprendía por su diseño cupé y su precio asequible. Su motor de 4 cilindros tenía 82 CV para una velocidad máxima de 170 km/h.
Audi 200 Quattro // '007: Alta tensión' (1987)
La primera película con Timothy Dalton como 007 presentó a este 200 Quattro la firma Audi. Fue la primera ocasión que aparecía en la saga de películas del espía británico. El automóvil contaba con un motor turbo de cinco cilindros y 20 válvulas. Entregaba 220 CV y su velocidad máxima era de 240 km/h.
Rolls-Royce Phantom V // 'Con licencia para matar' (1989)
Fue un modelo extraexclusivo construido por Rolls-Royce entre 1959 y 1968, y estaba basado en el Silver Cloud II que ofrecía una carrocería sedán de cuatro puertas con un motor V8 de seis litros y 203 CV de potencia. Alcanzaba una velocidad máxima de 180 km/h, nada mal para una carrocería que pesaba 5.600 libras (2.540 kg).
BMW Z3 // 'Goldeneye' (1995)
BMW consiguió unir el lanzamiento de su nuevo descapotable biplaza al de la película. Las dos unidades preserie que cedieron para el rodaje, fueron custodiadas día y noche hasta la finalización. Se caracterizaba por un motor de 4 cilindros de 140 CV de potencia y una velocidad máxima de 205 km/h.
BMW 750iL // 'El mañana nunca muere' (1997)
Nueva película en la que BMW era protagonista como el coche del espía. En esta ocasión este Serie 7 se podía conducir por control remoto usando un móvil Ericsson. Contaba con un propulsor de 4395 cc y 408 CV de potencia. La velocidad máxima estaba autolimitada a 250 km/h.
BMW Z8 // 'El mundo nunca es suficiente' (1999)
El público pudo contemplar por primera vez este coche en el estreno. Al igual que pasó con el Z3, durante el rodaje estuvo muy vigilado para que no se pudieran sacar fotos. El motor era un V8 de 400 CV de potencia y la velocidad máxima (limitada electrónicamente) era de 250 km/h.
Aston Martin Vanquish // 'Muere otro día' (2001)
Aston Martin regresaba al 'garaje' de James Bond con este Vanquish, que fue el tope de gama del catálogo de la firma británica. Contaba con un motor V12 de seis litros de cubicaje y 450 CV de potencia. Era capaz de acelerar de 0 a 100 en 4,7 segundos y su velocidad máxima era de 306 km/h.
Ford Mondeo // 'Casino Royale' (2006)
En la primera película de Daniel Craig como 007, Bond aparece a bordo de la cuarta generación del Ford Mondeo, la berlina superventas de la que solo en Europa se han comercializado cinco millones de unidades desde 1993, aunque ya ha dicho adiós a nuestro mercado. El modelo de la cinta montaba un motor 2.0 Ecoboost de 203 CV y una velocidad máxima de 232 km/h.
Volkswagen Escarabajo // 'Quantum of Solace' (2008)
Un coche que estuvo casi 72 años en producción. En este caso el Escarabajo es un modelo de 1969 que contaba con un motor de 1584cc y 50 CV de potencia. Una caja de cambios de cuatro marchas y una velocidad máxima de 130 kilómetros hora. Fue otro icónico modelo que aparece en la saga.
Jaguar XJ X351 // 'Skyfall' (2012)
Un modelo inglés para el espía más inglés de la historia. El ejemplar es la cuarta generación de la berlina de lujo. Disponía de un motor V6 con supercargador de 3 litros y 340 CV de potencia. Podía acelerar de 0 a 100 en 5,9 segundos y la velocidad máxima era de 250 km/h.
Aston Martin DB10 // 'Spectre' (2015)
Para el rodaje de esta película se necesitaron diez modelos. Se trata de un espectacular cupé de dos puertas con motor central y tracción trasera. Cuenta con un motor V8 de 4,7 litros y 436 CV. La velocidad máxima es de 306 km/h.
Aston Martin DBS Superleggera // 'Sin tiempo para morir' (2021)
En la última película de Bond, la número 25, aparece la versión más deportiva y exclusiva del DBS desarrollada por la marca británica hasta entonces. La firma italiana Carrozeria Touring Superleggera se ha encargado del diseño de este superdeportivo de dos puertas. El propulsor es un V12 de 725 CV que permite una velocidad máxima de 339 km/h.
Land Rover Defender 90 “60 Aniversario” // 2022
Y, por último, este nuevo modelo que la firma Land Rover ha desarrollado para conmemorar la onomástica de 007, un Defender 90 preparado para participar en el Rallie Bowler Defender Challenge de 2022. Con el propulsor de gasolina P300 Ingenium, que desarrolla 300 CV de potencia y 400 Nm de par motor.