¿Sabes qué es la calandra en la carrocería del coche? Así ha evolucionado la de Mercedes con los años
Es uno de los elementos más distintivos de un vehículo
Cuando hablamos de algún coche icónico en concreto, siempre nos quedan detalles de algunos de sus elementos. Una carrocería icónica como la de un Beetle, los faros escamoteables de un F40, las puertas suicidas de un Rolls-Royce…
Pero hay algo por encima de todo que marca la línea de diseño ya no solo de un modelo en concreto, sino de todos (o casi) todos los modelos que puede sacar una marca. Y este elemento es la calandra. A continuación explicaremos qué es y cómo han evolucionado las de uno de los pioneros de la automoción: Mercedes-Benz.
¿Qué es la calandra?
La calandra, parrilla o rejilla es un elemento que nació con el objetivo de proteger al radiador, así como a los demás elementos frontales del motor. Es fundamental en los motores de combustión, ya que sin ella, estos se sobrecalentarían y griparían.
A partir de su uso práctico, que no lo ha perdido, la calandra se ha convertido en la identidad de marca de los fabricantes, entre ellos de uno de los pioneros como es Mercedes-Benz. Desde que presentaran su primer vehículo hace más de 100 años, ha marcado la línea de cada nueva generación y ahora que ha pasado el tiempo podemos ser testigos de ese cambio.
Todo surge cuando W. Maybach instaló su novedoso radiador de panal en el Mercedes 35 CV para que el motor no se calentase. Esta innovación fue rápidamente copiada de inmediato y se convirtió en imagen de marca para todos los fabricantes.
Mercedes, además, ha sido un gran diferenciador en sus calandras, ya que su estrella plateada iba flotando sobre la propia calandra hasta los modelos de principios de los 2000. Un detalle que hacía que aunque vieses un coche de lejos y no lo consiguieses distinguir por su carrocería, pudieras hacerlo en cuanto vieras su parrilla. Elemento que también incluirían en sus Maybach de lujo. Más tarde, retomarían el incrustar la estrella de la marca en el centro de la calandra, y una sencilla línea horizontal, evocando a sus diseños de los años 50.
También han cambiado sus líneas interiores, más cuadriculadas en sus primeros años de historia, hasta las rejillas de diamante, o las actuales líneas verticales que presentan los modelos AMG.
Por si fuera poco, Mercedes no ha querido parar ahí y ahora que los motores eléctricos no necesitan una refrigeración como los de combustión, sus calandras presentan un diseño de líneas suaves, con pocos detalles y dejando la estrella al descubierto como elemento principal de la misma.