¿El coche que nació anticuado? Cuando una carrocería más grande no logra el éxito esperado
Este clásico Renault aumentó sus líneas para mayor confort sin conseguir la aceptación del público
Normalmente, las marcas de coches generalistas diseñan sus vehículos, pensando en las necesidades del público mayoritario. Esto quiere decir que si la necesidad requiere de una carrocería, SUV, un utilitario o un hatchback, estas marcas traigan al mercado modelos con ese tipo de carrocerías.
Sin embargo, en ocasiones, hay que arrocerías que o bien se adelantan a su tiempo, y en otras ocasiones ocurre que llegan tarde. Y en ambos casos, lo que sucede es que esos coches no tienen el éxito deseado el fabricante. Y eso es justo lo que le pasó al grandísimo Renault 10. Hace muchos años, cuando las marcas tenían en mente crear un nuevo modelo, tardaban unos cinco años desde que se diseñaba la carrocería y se desarrollaban sus componentes hasta que el comprador final podía adquirirlo.
Ahora, con la modernización de la tecnología, y a lo que los coches no tienen la durabilidad de la que si gozaban hace bastantes años, el diseño de una nueva carrocería se realiza en un plazo más corto de tiempo. El problema que existía antes era que, con la larga vida de los automóviles, los nuevos modelos tardaban más en salir, por lo que una vez puestos en las calles ya podrían quedar obsoletos para las necesidades de las personas.
El poco éxito del Renault 10
Este sedán de gran tamaño producido por la marca francesa del rombo, tratada de ser una versión lujosa y cómoda del mítico Renault 8. Un coche que sí que gozo de éxito tanto entre los conductores corrientes, así como en la competición.
La carrocería del Renault 10 era mucho mayor y alargada que la del Renault 8, 12 cm por delante y 8 cm por detrás para ser exactos. Sin embargo, esta longitud era innecesaria para los compradores, que preferían la carrocería más compacta del 8 ya quedé por si era bastante capaz.
Y es que, de por sí, la mayor longitud de la carrocería no mejoraba el espacio de los ocupantes en el interior del habitáculo, sino que la mejora se notaba en el maletero que sí que era de mayor tamaño. Por esta razón, los compradores se decantaban por el 8, ya que era más barato, bonito y de mejor maniobrabilidad, sobre todo las versiones TS y Gordini.
Sumado a esto, el concepto de diseño mecánico, que disponía el motor en la parte trasera y de manera longitudinal y de tracción trasera también estaba quedando obsoleto desde el momento en el que salió al mercado. Algo que se acentuó más todavía cuando la marca del rombo lanzó el revolucionario Renault 12. Un coche con una carrocería, totalmente distinta a lo que se había visto, mucho más fácil de conducir, cómodo y con una mecánica dispuesta en la parte delantera.
En España si se vieron muchos por las calles
En favor del Renault 10 tenemos que decir que en España era una carrocería fácilmente reconocible. Esto es porque además de que se fabricase en parte en nuestro país desde el 66 hasta el 70, el vehículo formó parte de los cuerpos de la Policía Nacional, pintado con su famoso color marrón tierra de aquellos años, así como de la Guardia Civil con su clásico verde oscuro y blanco.