El Mercedes-Benz 300 SL cumple 7 décadas de aventuras en la carretera
El Mercedes-Benz 300 SL es uno de los mitos de la industria del automóvil, ya que representa distintivos únicos que van desde el diseño, el lujo, el misticismo y una excelente fabricación. El pasado mes de febrero de 2024 cumplió nada más y nada menos que 70 años de aventuras, la misma edad que tendrá el actor Jhon Travolta, el director James Cameron, la presentadora Oprah Winfrey y la expolítica alemana Angela Merkel, entre otras figuras de renombre internacional. También en España celebraremos el 70 cumpleaños del actor Antonio Resines y del presentador y cantante Bertín Osborne.
El 6 de febrero de 1954, en el Salón Internacional del Deporte de Nueva York, Mercedes mostraba por primera vez al 300 SL y, al mismo tiempo, presentaban la versión descapotable del 300 SL, la 190 SL W 121, un elegante roadster que enamoraba aún más por su atractivo diseño. En la actualidad, esa estrategia de presentar dos modelos juntos no es muy habitual, pero en los 50, Mercedes quería mostrar al mundo su potencial. En realidad, los 300 SL y 190 SL no eran coches ‘nuevos’ como tal, ya que eran el producto de calle de los 300 SL de carreras de 1952 y que participaron en carreras como la Mille Miglia, las 24 Horas de Le Mans o la Panamericana.
En general, el 300 SL es un deportivo cuya principal rasgo identificativo está en las puertas de ala de gaviota (“gullwing” en inglés o “papillon” en francés), que eran únicas en un vehículo de producción en ese momento. Aunque muchos piensan que es por estética, en realidad tenían un por qué: el 300 SL tenía un bastidor tubular ligero que impedía instalar unas puertas al uso y la solución eran éstas.
Otra consecuencia de las puertas de ala de gaviota era el diseño del volante: se podía girar hacia abajo para permitir un acceso más fácil de las piernas al espacio para los pies. A pesar del volante pivotante, entrar en el Coupé no era precisamente fácil. Esto cambió cuando apareció el 300 SL Roadster (1957). Esta variante abierta tenía puertas con bisagras delanteras. Para lograr esto, se modificó el marco y se bajó en los puntos de entrada. Esta versión de marco se puede ver en el "banco de trabajo" en la sala 4 de las “Legendas” del museo deStuttgart
Entre 1954 y 1957 se fabricaron 1.400 ejemplares del 300 SL Coupé y 1.858 unidades del Roadster. Sin duda, todo un triunfo, uno más de Mercedes, en esos tiempos, y que ahora cumple 7 décadas de admiración del sector automovilístico.