Quizás alguna vez hayas visto o leído en prensa y medios de comunicación el concepto de carrocería ‘targa’ para referirse a un descapotable.

Horas estacionado bajo un sol de justicia. Arena por todo su cuerpo. Salitre y humedad atacando sus ‘huesos’. Gaviotas que pueden posarse y hacer caquitas sobre él.

¿Cómo se diseña el coche destinado a trasladar al mismísimo presidente de los Estados Unidos? La estética y la elegancia se dan por sentadas y todos los esfuerzos se centran en la seguridad. Una seguridad que va mucho más allá de la carretera…

Durante el verano, al menos a lo largo y ancho de la península, es prácticamente imposible evitar la exposición al sol del coche. Lo que sí podemos hacer es contener el efecto y las consecuencias negativas que tiene el sol sobre la pintura y la carrocería del coche.

Más o menos 1.400 días. Eso son casi 4 años. Más de 33.000 horas. En realidad, el proceso empieza antes, en los despachos, elaborando un briefing en el que se marcan las pautas que orientarán el diseño del vehículo. ¿En qué segmento estará? ¿Quién es el cliente perfecto de ese coche? ¿Qué necesita? ¿Cuáles son sus gustos?