En un vehículo cada extra que le añadas son mejoras que, evidentemente, hacen que el precio suba. Si las diferencias entre un coche de alta gama y un coche de súper lujo se palpan a distancia, cuando hablamos ya de los extras que podemos incorporar, entonces esas diferencias (sobre todo en precio) se disparan. Al fin y al cabo, se trata de coches muy exclusivos, en los que los equipamientos no están al alcance de todos.
Algunas marcas como Volvo, Porsche y BMW quieren dejar de usar fibra de carbono en la creación de sus modelos. Muchos se preguntarán por qué, teniendo en cuenta que es un material muy resistente y bastante ligero, que se utiliza tanto en coches de calle como en la Fórmula 1.
La firma alemana BMW ha creado gran cantidad de vehículos a lo largo de su historia. No obstante, de todas sus creaciones, uno de los coches más curiosos es, quizás, el primer modelo que montaba un turbocompresor en su motor. Un avance tecnológico tal que merecía que se bautizara a ese modelo, precisamente, con ese nombre, ‘Turbo’, Un vehícuo del que ya pasado medio siglo desde su creación y que guardaba otras sorpresas más allá del motor...