Un día Alicia llegó a una bifurcación en el camino y vio un gato de Cherise en un árbol. - Me podrías indicar hacia dónde tengo que ir desde aquí? - preguntó ella. - Eso depende de adónde quieras llegar – respondió el gato. - No lo sé- contestó Alicia. - En ese caso, da igual hacia donde vayas.  Alicia en el País de las Maravillas, Lewis Carrol.

Pocos coches negros se ven hoy en día por la calle, en comparación con otras épocas y al margen de los vehículos oficiales. Parece mentira que cuando el automóvil empezaba a despuntar, Henry Ford dijera aquello de “Un cliente puede tener su coche del color que desee, siempre y cuando desee que sea negro”, frase de la que por cierto, te hablamos aquí.

¿Has oído hablar alguna vez de la fordita? También conocida como fordite (en inglés), ágata del motor o ágata de Detroit se trata de piezas de pintura de automóvil endurecida que son cortadas y pulidas para la creación de gemas y unas curiosas joyas. Viéndolas nadie lo diría, ¿verdad?

Probablemente estés pensando que es una pregunta extraña. ¿Cómo no vas a ser de qué color es tu coche? ¡Pues claro que lo sabes! Pues no estés tan seguro, quizás te sorprendas. Para empezar, ¿sabías que existen unos 115 tonos de amarillo? ¿45 de naranja? ¿Sabías que hay 67 tonos de blanco y 50 tipos de negro? ¿Sabías que hay hasta 111 variedades de azul, 105 de rojo y 100 tonos de verde? Una gran variedad mucho más complicada que los colores básicos con los que trabajaban antaño pintores, diseñadores gráficos etc.